Guachinche El Cubano: uno de los más populares de Tenerife se sitúa en La Orotava (2024)

Continuamos con nuestra particular serie de guachinches de Tenerife (constará de 3 capítulos) con «Guachinche El Cubano», uno de los más populares de la isla y que se sitúa en «La Orotava», en un enclave único, rodeado de tierras y de campo y con unas vistas espectaculares del pueblo y el mar justo detrás. Daba un paso más en el concepto de guachinche y se acercaba mucho más a la idea que llevábamos en la cabeza sobre este tipo de restaurante tan típico en Tenerife.

Qué es un Guachinche?

Un guachinche como «Guachinche El Cubano» es un tipo de restaurante típico de las Islas Canarias, especialmente popular en la isla de Tenerife. Estos establecimientos son conocidos por su ambiente familiar, su cocina casera y por ofrecer comida y vino de producción local, a menudo elaborados por el propio propietario del guachinche.

Características principales de un guachinche:

Origen rural y casero: Originalmente, los guachinches eran lugares en los que los agricultores vendían el excedente de su vino acompañado de comida sencilla para atraer clientes.
Comida típica canaria: Ofrecen platos tradicionales de la gastronomía canaria como las papas arrugadas con mojo, el escaldón de gofio, el conejo en salmorejo, o las costillas con piñas y papas.
Vino local: Es un elemento central del guachinche, generalmente producido en las fincas o bodegas cercanas.
Ambiente informal y acogedor: Suelen estar ubicados en entornos rurales, como garajes, patios o incluso espacios improvisados en casas, y destacan por ser económicos y sin pretensiones.
Regulación limitada: Según la normativa en Canarias, un guachinche auténtico debe ofrecer exclusivamente vino de la propia producción y una carta limitada de platos típicos. Sin embargo, en la práctica, algunos se han convertido en restaurantes más grandes que conservan el nombre y estilo del guachinche.

ales maze z0bACVUDTJM unsplash — Foto de Ales Maze en Unsplash

El concepto tiene raíces profundas en la cultura y tradiciones de Tenerife, y visitar un guachinche es una experiencia muy valorada tanto por locales como por turistas que desean conocer el lado más auténtico de la gastronomía canaria.

Guachinche El Cubano: un rincón muy especial

«Guachinche El Cubano» es de difícil acceso ya que tienes que pasar por varias carreteras donde apenas cabe un coche aunque merece mucho la pena. Por el sitio en el que se encuentra (con parking privado), por sus vistas y por su comida. Y luego, con esa decoración tan suya, donde puedes encontrar desde una chapa de Pepsi de hace años hasta una platanera con varias gallinas cacareando. Muy puro. Vamos con nuestra experiencia en «Guachinche El Cubano».

Si buscas «Guachinche El Cubano» en Google encontrarás multitud de referencias y observarás que es uno de los más recomendados de la isla de Tenerife. Hay varios motivos (como los comentados anteriormente) aunque el precio seguramente sea uno de ellos (comimos 6 personas sin miramientos por 87 euros).

Aparcamos nuestro coche y entramos en la zona donde se sitúa el local. Ya la entrada nos daba una pista de qué nos íbamos a encontrar en «Guachinche El Cubano». Todo muy rústico. En bruto. Con apariencia de los típicos huertos que tenemos en nuestra zona.

Seguíamos entrando en el local mirando con cierto asombro cada uno de los rincones de los que constaba el guachinche. Porque parecía improvisado. Cumpliendo religiosamente con todo lo que debe ser un guachinche. Con sillas diferentes, mesas de camping y decoración llamémosla «barroca». Nos encantó. A esto veníamos.

Llegamos hasta nuestra mesa y nos sentamos para disfrutar de estas vistas mientras comíamos. Todo un lujo. Sentías que estabas en un lugar especia, donde todo lucía añejo pero que conservaba ese encanto tan especial que a veces buscamos, tan alejado de la actual plantilla que siguen todos los nuevos restaurantes.

Guachinche El Cubano: especialistas en carnes

Cada guachinche suele estar especializado en carne o pescado y, en este caso, hablamos de uno de carne. Y en que sólo podías beber vino si querías alcohol. Nada de cerveza. Su castillo, sus reglas. Su carta era limitada (como la que os comentamos en «La Pimienta» y cantada por su servicio (con un look acorde a la decoración del guachinche). No apuntamos los precios de los platos aunque si todo nos costó 87 euros y bebiendo vino, os los podéis imaginar.

En esta ocasión, pedimos 4 entrantes en «Guachinche el Cubano«, donde probaríamos varios de los platos típicos de la isla. No nos podíamos dejar nada atrás. Comenzamos con unos garbanzos, bastante bien especiados y muy potentes de sabor.

Les siguió un poco del típico queso asado, que venían con salsas verde y de pimientos. Quizás el que más nos gustó de todos los que probamos en la isla aunque sin emocionarnos realmente ninguna de las veces (es que tenemos muy bien queso por nuestra zona).

El siguiente plato fue «Ropa Vieja«, otro plato típico canario y que destaca por ser una receta de aprovechamiento, ya que tradicionalmente se elabora con las sobras del cocido o puchero canario. Es un plato muy sabroso, lleno de ingredientes y con una textura característica. Nos gustó bastante y, al igual que los garbanzos, nos pareció que venía muy bien especiado.

Continuamos con una especie de «Huevos revueltos» que también nos parecieron interesantes, sobre todo para acompañar una carne. El binomio patatas-huevos no fallará nunca se coma donde se coma. Es un plato ganador.

Y para terminar en «Guachinche El Cubano», pedimos un variado de carne acompañada de papas con mojo (cómo no). Las 3 carnes rayaban a gran nivel aunque nos pareció que el pollo y el lomo alto de ternera estaban un punto por encima ya que el cochino asado al horno era algo más parecido a la carne mechada y quizás no era lo que esperábamos. Aunque igualmente bueno.

Toda la comida en «Guachinche El Cubano» obviamente venía acompañada de su vinito de la casa. Suave y perfecto para no parar. Algo que puede complicar la tarde aunque no la nuestra ya que el conductor de la furgoneta no bebía alcohol. Buen nivel general de la comida, muy muy barato y una experiencia bastante curiosa por el tipo de local que era.

Conclusión sobre «Guachinche El Cubano»

«Guachinche El Cubano» nos pareció una experiencia bastante divertida. Era lo que teníamos en mente cuando pensábamos en un guachinche y no nos defraudó. Pintoresco, situado en un enclave maravilloso y con unas vistas de quitar el hipo, con el sol como testigo. La comida nos pareció que estaba buena y el precio, como en casi toda la isla aunque aquí se acentuaba más, nos sorprendió bastante. 100% recomendable.